El sector del turismo de la provincia de Palencia evoluciona de modo positivo durante el último año, según se desprende de los datos actualizados de viajeros y pernoctaciones que difunde el Instituto Nacional de Estadística (INE). El aumento se registra tanto en los establecimientos hoteleros convencionales como en los de turismo rural, así como en la asistencia y el uso de los principales recursos turísticos que gestiona la Diputación de Palencia: los barcos del Canal de Castilla ‘Juan del Homar’ (Frómista) y ‘Marqués de la Ensenada’ (Herrera de Pisuerga), la Cueva de los Franceses y la villa romana La Olmeda. La asistencia a estos tres últimos en lo que va de año consolida las importantes subidas de 2018, año singular por la celebración de Las Edades del Hombre en Aguilar de Campoo y del quincuagésimo aniversario del yacimiento.
Los hoteles, hostales y pensiones de Palencia han registrado un aumento de la cifra de de viajeros —es decir, turistas que al menos pernoctan una noche— del 4,9% durante los últimos doce meses comparado (agosto de 2018-julio de 2019) con el mismo periodo del año anterior, contabilizando ya los últimos datos facilitados hace escasos días por el INE. Ese crecimiento se ha traducido en una subida del 5,8% del total de pernoctaciones en ese tipo de oferta hotelera.
La provincia de Palencia ha superado el último año la barrera de los 200.000 viajeros (en concreto, 201.517) y se ha aproximado al umbral de las 360.000 pernoctaciones hoteleras (358.442), lo que ratifica el crecimiento continuado en los últimos años y la paulatina vuelta a las cifras anteriores a la crisis económica. En la actualidad, los 119 hoteles, hostales y pensiones de esta provincia, que suman unas 3.800 plazas hoteleras, rondan el promedio de unas 30.000 pernoctaciones al mes, cuando en la recesión bajaron a niveles de 23.500 pernoctaciones mensuales, siguiendo la tónica general sufrida tanto a nivel nacional como internacional por un sector productivo muy sensible al momento del ciclo económico.
MEJOR EN TURISMO RURAL. Esa misma evolución positiva resulta aún más patente en los establecimientos de turismo rural en Palencia, apartado en el que resulta más competitivo el sector provincial, debido a su amplia oferta relativa —254 establecimientos con más de 2.300 plazas— y a su distribución más equilibrada por todo el territorio de Palencia. Así, la cifra de viajeros que pernoctaron en un establecimiento de turismo rural durante el último año ha crecido el 10,9%, al pasar de 35.534 a 39.418 (datos de julio de 2018 a junio de 2019, últimos disponibles), que se tradujeron también en un aumento similar en pernoctaciones (+9,7%). Es reseñable que en los últimos doce meses se superó el umbral de las cien mil pernoctaciones en los establecimientos rurales de la provincia de Palencia: en concreto, 101.263 pernoctaciones, según la misma Encuesta de Ocupación de Alojamientos del INE, cuyos datos de turismo rural del pasado mes de julio no se conocerán hasta este viernes, 30 de agosto.
Al igual que sucede con los hoteles convencionales, los establecimientos palentinos de turismo rural registran también una continua recuperación durante los últimos años. En los peores años de la crisis bajaron a 26.500 viajeros al año (ejercicio de 2014), con unas pernoctaciones totales de apenas 66.000 noches (2014) o incluso por debajo de ese umbral (65.685 pernoctaciones en 2013). Tras sucesivos incrementos en los últimos años, las últimas cifran sitúan al turismo rural palentino en torno a los 40.000 viajeros y las 100.000 pernoctaciones por año, lo que representa subidas acumuladas del 51% y del 65% respectivamente durante el último quinquenio (2015-2019).
Asimismo, resulta muy significativo el crecimiento que se ha registrado en la estancia media del viajero en los establecimientos rurales. Si hace cuatro años, apenas superaba las 2,3 noches por viajero, durante el último año se aproxima ya a las 2,6 noches. También se percibe aumento de la duración del viaje turístico en los establecimientos hoteleros convencionales, con 1,78 noches por viajero en el último año (en 2013 llegó a perderse el umbral de las 1,70 noches por estancia).
183 PLAZAS MÁS DE TURISMO RURAL. Frente al aumento de plazas de turismo rural, el estancamiento en la creación de plazas hoteleras convencionales (hoteles, hostales y pensiones) es una de las causas por las que no se registran mayores incrementos en las pernoctaciones de ese tipo. Así, en el primer semestre de este año, la cifra de establecimientos hoteleros convencionales apenas creció en Palencia (0,8%) con respecto al pasado año, ni tampoco el número de plazas de esa oferta (0,2%). En cambio, en el último año se observa un relevante aumento en el número de establecimientos de turismo rural: se crearon catorce nuevos negocios (+5,8%) con 183 nuevas plazas creadas en el primer semestre de 2019 con respecto al mismo periodo de 2018 (+8,5%).
Estos indicadores positivos se ven, asimismo, refrendados por la evolución de la demanda y el uso de los recursos turísticos propios de la Diputación. La villa romana La Olmeda, con más de 42.500 visitantes registrados hasta el pasado fin de semana (domingo 25 de agosto), está consiguiendo en lo que va de 2019 consolidar las buenas cifras logradas el pasado año, que cerró con 67.630 visitantes (el 9,2% más que el año 2018), debido al refuerzo de la difusión y de las actividades con motivo de la celebración del quincuagésimo aniversario del yacimiento, así como la sinergia derivada de la exposición ‘Las Edades del Hombre’ en la provincia (concretamente, Mons Dei, que permaneció abierta en Aguilar de Campoo de mayo a noviembre de 2018). Esa buena asistencia, unida a la gran acogida de la programación Cultura a la romana auguran que La Olmeda cerrará 2019 con cifras no muy alejadas de las excepcionales alcanzadas en 2018 y, desde luego, superiores a las del ejercicio anterior.
DOS MIL VISITANTES AL MES EN LAS CUEVAS. Algo similar sucede con otro recurso que gestiona la Diputación, las Cuevas de los Franceses, situada a poco más de quince kilómetros de Aguilar de Campoo, que mantiene cifras de asistencia prácticamente idénticas a las del pasado año —10.062 visitantes de enero a julio de este año, por 10.374 en los siete primeros meses de 2018—, lo que también hace prever un saldo anual final semejante a los buenos datos del pasado año con ‘Las Edades del Hombre’ en Aguilar de Campoo. Aun sin ese reclamo próximo, las Cuevas de los Franceses, que cierran los meses de enero y febrero, logran mantener este año ese promedio de dos mil visitas al mes.
En cuanto al comportamiento de los barcos turísticos en el Canal de Castilla, hay que subrayar en primer lugar el acierto que ha supuesto el traslado a Frómista, por razones técnicas, de la embarcación ‘Juan del Homar’, que empezó a prestar servicio en esa localidad el 6 de agosto del pasado año. En los primeros siete meses del año acumula ya 5.683 usuarios, cifras que incluso superan el global anual de esa embarcación de los años 2015 (3.975), 2016 (4.752) y 2017 (3.718), cuando el barco partía de Villaumbrales. A falta de datos comparativos homogéneos, sí puede estimarse un aumento cercano al 8,5% si se relacionan los datos de los últimos cinco meses (marzo-julio 2019) con los que obtuvo, ya en Frómista, de agosto a diciembre de 2018 (5.058 viajeros).
Por su parte, el barco ‘Marqués de la Ensenada’, que parte de Herrera de Pisuerga también registra un aumento de su demanda. En lo que va de año 2019 (enero-julio) acumula 6.326 usuarios, el 5,8% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior (5.981), que de mantenerse supondría la consolidación del espectacular aumento del uso de este recurso vivido en 2018 (+22%, con un total anual de 13.600 usuarios), beneficiado sin duda por el flujo de viajeros que acudió a la zona por la celebración en Aguilar de Campoo de la muestra de ‘Las Edades del Hombre’. Todo hace indicar que esta embarcación puede cerrar este año en cifras similares, muy superiores a los 7.600 usuarios anuales que registraba hace apenas cuatro años (2015).
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