Este verano, montes oseros sin basuraleza

Las medidas de precaución para evitar contagios del covid-19 hacen muy atractivo este verano el turismo de naturaleza como alternativa a destinos tradicionalmente masificados. Desde la Fundación Oso Pardo (FOP) consideramos positiva esta actividad como fuente de recursos para las economías locales del medio rural siempre que se desarrolle de forma sostenible. Por eso, como colaboradores del Proyecto […]

07 de julio de 2020

Las medidas de precaución para evitar contagios del covid-19 hacen muy atractivo este verano el turismo de naturaleza como alternativa a destinos tradicionalmente masificados. Desde la Fundación Oso Pardo (FOP) consideramos positiva esta actividad como fuente de recursos para las economías locales del medio rural siempre que se desarrolle de forma sostenible. Por eso, como colaboradores del Proyecto LIBERA, de SEO/BirdLife en alianza con Ecoembes, hacemos un llamamiento a los visitantes de los espacios naturales para que extremen el cuidado en no abandonar residuos en ellos, de ningún tipo, y sigamos manteniendo la extraordinaria calidad ambiental que caracteriza a los territorios oseros.

Abandonar basura en la naturaleza, concepto para el que se ha acuñado el término #basuraleza, no es solo un problema estético y ético, también se convierte en causa de contaminación que altera nuestro capital natural, como el agua de los ríos, y puede llegar a afectar a la flora y la fauna de nuestros montes. Durante la última edición de la campaña de ciencia ciudadana 1m2 por el campo, los bosques y el monte, organizada por LIBERA en diciembre de 2019, y en la que participó la FOP, se retiraron y caracterizaron 4 toneladas de basura de espacios naturales de 47 provincias. Botellas de plástico, latas y piezas pequeñas de plástico fueron los principales residuos encontrados. El volumen de colillas que acaban en los montes también representa una grave amenaza debido a que contienen sustancias como cadmio, arsénico, nicotina o tolueno, capaces de contaminar 50 litros de agua por cada colilla abandonada, además de ser posible origen de incendios.

Resulta fundamental que los usuarios de los espacios naturales sean conscientes del perjuicio que acarrea el abandono de cualquier residuo y se conciencien de llevarlos consigo hasta finalizar la actividad. Igualmente es importante depositar cada resto en el contenedor correspondiente para su posterior tratamiento o reciclado.

Tampoco se deben abandonar restos de alimentos

Existe una tendencia a considerar que el abandono en el campo de los restos del pícnic o del bocadillo no representan un problema por su carácter orgánico, fácilmente biodegradable. Incluso se contempla como un suplemento aprovechable por los animales silvestres. Sin embargo esto tampoco es una buena idea pues puede llegar a alterar el compartamiento de algunas especies, haciéndolas dependientes de los recursos humanos, y en algunos casos acarrearles la muerte.

Los osos pardos se encuentran entre los animales oportunistas que aprovechan cualquier fuente de alimento fácil. También son criaturas de hábitos, que volverán a aquellos lugares en donde hayan encontrado esos recursos. En España no existe actualmente un problema con osos habituados a las basuras humanas, como ocurre con los osos negros de Norteamérica, pero precisamente por ello es importante prevenir.

No debemos abandonar restos de comida en general, y en particular en espacios y merenderos ubicados en entornos naturales en donde puede acumularse una mayor cantidad de desechos de fácil acceso para los animales salvajes. Estos encuentran alimento suficiente en el medio natural y no necesitan nuestra comida.

Comentarios

0 comentarios