El festival de música independiente Palencia Sonora ha despedido su décimo quinta edición con los conciertos celebrados en la Plaza de San Antolín y tras cuatro intensos jornadas que han llevado a diversos escenarios de la ciudad 35 actividades y más de treinta horas de música en directo. Cifras que se han visto respaldadas por la presencia de más de 12.000 espectadores procedentes de 40 provincias de la geografía peninsular.
Los responsables de la organización hacen un balance positivo: «pese a las malas condiciones meteorológicas, la asistencia de público se ha incrementado respecto a la edición anterior. Cada vez es mayor el número de aficionados de fuera de la Comunidad que vienen al festival». «Palencia Sonora —subraya Juan Cruz Pascual— ha vuelto a dinamizar la actividad económica y comercial de la ciudad con un elevado porcentaje de ocupación hotelera». Prueba de ello, señala, es el «gran ambiente festivo que se vivió durante los conciertos matinales del sábado, que llenaron la Plaza Mayor, la Plaza de San Miguel y otros lugares cercanos de miles de aficionados a la música». Para David García, otro de sus promotores, una de las claves es la apertura de la programación al casco histórico: «el Palencia Sonora se vive dentro de la ciudad, los conciertos en la calle son una de las propuestas con mejor acogida entre el público y una forma de dar a conocer la capital entre quienes nos visitan. Algunos, de hecho, conocen por vez primera Palencia y su provincia durante la celebración del festival».
Los organizadores apuestan por seguir trabajando en la misma línea de cara al futuro: «queremos apostar por un festival cómodo para el espectador, con un cartel atractivo y con actividades en la calle. Es la mejor fórmula para mantener ese público fiel que nos considera uno de los mejores festivales de pequeño-mediano formato del calendario nacional». «Tenemos que seguir diferenciándonos de otros festivales y, en este sentido, las actividades dirigidas a los más pequeños y las propuestas coorganizadas con diversos colectivos y agentes culturales de la ciudad son un valor añadido», afirma David Frechilla.
Un festival con proyección y apoyos
El éxito de la cita musical palentina se ha reflejado, asimismo, en la cobertura informativa en medios y en el impacto y visibilidad en redes sociales. «La web del festival ha recibido más de 85.000 visitas durante los últimos meses y las visitas a nuestros perfiles en Facebook e Instagram han superado, respectivamente, las 4.300 y 7.300 en la última semana», destaca Juan Cruz Pascual, quién valora los «positivos comentarios recibidos durante estos días: «trabajamos cada año para mejorar las instalaciones, la zona de restauración del recinto del Sotillo y el área de acampada, y para ello es esencial la relación con nuestros espectadores. Eso nos permite ir mejorando la cercanía y la calidad año tras año». Sostenible, económico y cómodo para el público. Son los criterios que marcan la filosofía de los promotores. También la colaboración con otras entidades y colectivos de la ciudad, como la Muestra de Cine de Palencia, el Ateneo de Palencia, el Conservatorio Profesional, la Escuela de Rock, Umamatura, la asociación comercial Palencia Abierta y el Complejo Asistencial de Palencia.
Los organizadores no olvidan tampoco el trabajo de los servicios de limpieza y la colaboración de Protección Civil, Policía Nacional y Policía Local, así como el apoyo y patrocinio de brindan las administraciones, en especial del Ayuntamiento, la Diputación provincial y la Junta de Castilla y León (a través de la Fundación Siglo para las Artes y el Turismo de Castilla y León y la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades), además de otras entidades como el Campus en Palencia de la UVA y el Centro Buendía. «Se trata —recalcan— de un proyecto de ciudad que necesita la complicidad de todos».
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