En Castilla y León, el porcentaje de mujeres donantes de sangre es mayoritario en la franja de edad de 18 años, pero disminuye gradualmente a medida que avanzan a los 24 años.

Cualquier mujer mayor de 18 años, con buen estado de salud, un peso superior a los 50 kg y sin antecedentes de enfermedades transmisibles por vía sanguínea, puede ser donante de sangre. Pueden donar hasta tres veces al año, con una separación de dos meses entre cada donación.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León ha lanzado una campaña para destacar el papel de las mujeres donantes. La campaña, bajo el lema ‘Una mujer comprometida dona sangre’, busca incentivar el compromiso solidario de las mujeres y también aborda un proyecto para analizar los factores que influyen en la evolución de la donación femenina.

El objetivo del proyecto es analizar la experiencia vital de las donantes y obtener conclusiones para detectar y definir medidas eficaces para mejorar los datos de donación en cualquier centro de transfusión de España.

Actualmente, las mujeres entre 18 y 24 años representan el 58% de los donantes de sangre en Castilla y León. A partir de los 25 años, la proporción de donantes femeninas se equipara a la de los hombres (49% mujeres y 51% hombres) y, a partir de los 35 años, la proporción se invierte, con un 40% de mujeres y un 60% de hombres.

Ante este descenso gradual de las mujeres donantes de sangre a medida que avanzan en edad, el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León ha propuesto la necesidad de conocer las causas de esta disminución entre un colectivo poblacional generalmente comprometido socialmente.

Para llevar a cabo este estudio, conformado en su totalidad por mujeres (casi el 85% de la plantilla del CHEMCyL), se han definido dos fases. La primera fase es un mapa del recorrido vital de las donantes, a través de una cronología de hechos posibles que se pueden dar a lo largo de la vida de una mujer. En función del momento de la vida en el que se encuentren, se conocerán las circunstancias que pueden influir en su motivación para donar y se detectarán las posibles causas que determinan esa decisión.

La segunda fase, que comienza el 8 de marzo, consiste en el envío por correo electrónico de un cuestionario a una muestra suficientemente representativa de la población femenina de la comunidad. Además de informar sobre la donación sanguínea, el cuestionario permitirá obtener información necesaria para el desarrollo del estudio. Posteriormente, esta misma acción se llevará a cabo con mujeres donantes que han dejado de hacerlo.

Una vez concluido este proyecto, el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León hará partícipes de sus resultados y conclusiones a todas las mujeres que hayan colaborado en este estudio.