El Consejo de Gobierno de Castilla y León ha dado luz verde a una prórroga parcial del Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros, en colaboración con el Fondo de Transición Justa, con una inversión total de 281 millones de euros, combinando recursos propios y financiación europea en las provincias de León y Palencia. La Junta de Castilla y León contribuirá con 84 millones de euros, sumándose a los 197 millones provenientes de financiación europea hasta el año 2027.
Esta prórroga tiene como objetivo asegurar la continuidad y el compromiso con las áreas afectadas por el cierre de explotaciones mineras y el desmantelamiento de centrales térmicas. Permitirá la continuación de proyectos e iniciativas en marcha y el desarrollo de nuevos proyectos en las cuencas mineras de la Comunidad.
El Plan de Dinamización, orientado a los municipios mineros, tiene como objetivos estratégicos la defensa y refuerzo de la actividad de la minería del carbón, la promoción de nuevas actividades vinculadas a la minería, el fortalecimiento de la actividad económica en sectores distintos, el fomento del emprendimiento, la mejora de la formación y cualificación del capital humano, la implementación de un plan de empleo y otras medidas de protección social, así como la mejora del entorno.
La prórroga se justifica por la necesidad de mantener instrumentos que han demostrado ser efectivos para la reconversión y dinamización de las cuencas mineras. Entre ellos se encuentran la bonificación en el precio del suelo industrial en polígonos de propiedad de la Junta, la inclusión de un criterio de puntuación adicional para proyectos en municipios mineros, la continuidad del Plan Especial de Empleo, el mantenimiento de las Oficinas Tierras Mineras y el desarrollo de medidas específicas en el ámbito turístico, como la ampliación de la estación de esquí de Leitariegos-Valle de Laciana.
Desde 2016 hasta el cierre del ejercicio 2022, la Junta ha movilizado 439 millones de euros a través del Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros. Estos recursos han impulsado nuevas actividades vinculadas al sector, fortalecido tecnologías para aplicaciones del carbón y fomentado la investigación de yacimientos alternativos de minería no energética. Se han implementado diversas líneas de actuación en las comarcas mineras, con financiamiento a través de la Lanzadera Financiera, Sodical (ICE) y otras medidas gestionadas por el Instituto para la Transición Justa.
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